El centro cerebral de espiritualidad cósmica

Introducción

Es vital para la evolución del ser humano en la Tierra que su cerebro realice modificaciones básicas. En un tiempo muy lejano se vio obligado a crear centros de lenguaje, de escritura, de intelecto... pero ahora ha de crear un centro distinto, con una función ya no intelectual, sino espiritual. El hombre ha de crear cada cierta época, unas funciones cerebrales capaces de darle lo que necesita.

Es un tiempo anterior, tuvo que crear unos centros cerebrales para entenderse con el lenguaje, para plasmar ese lenguaje con la escritura y para poder responder a las preguntas de siempre: ¿Quién soy yo? ¿De dónde vengo? ¿Adónde voy? Pero ahora, porque el planeta y el ser humano han de pasar a niveles de mayor espiritualidad, se ve necesitado, a auto crear, a auto desarrollar un nuevo centro. Pero difícil es hacer algo cuando no sabes siquiera que es lo que debes realizar. Necesitábamos algunos datos básicos para empezar a trabajar y la primera referencia de la que disponíamos era que este centro estaba localizado en el área parietal. El resultado posterior del trabajo tuvo una recompensa en cuanto a la localización exacta del centro, dentro del lóbulo parietal, pero antes de hablar de ello, pienso es necesario que recordemos algunas funciones básicas de esta zona cerebral.

EL LOBULO PARIETAL

El lóbulo parietal limita hacia delante con el lóbulo frontal y está separado del mismo por la cisura de Rolando. Hacia abajo limita con el lóbulo temporal, del cual está individualizado por la cisura de Silvio. Hacia atrás, el lóbulo parietal, linda con el lóbulo occipital, del cual está diferenciado por el surco parieto-occipital.

• Lóbulo frontal
• Lóbulo Parietal
• Lóbulo temporal
• Lóbulo occipital
• Cisura de Rolando
• Cisura de Silvio
• Surco parieto-occipital

ZONAS DEL LOBULO PARIETAL

El lóbulo parietal tiene 3 partes bien diferenciadas. La parte más anterior forma la circunvolución parietal ascendente. Por detrás de ella, se abre la principal división del lóbulo parietal. El surco interparietal divide al lóbulo en dos partes: El lóbulo parietal superior y el lóbulo parietal inferior. El lóbulo parietal inferior está a su vez dividido en dos partes: la circunvolución angular y el lóbulo del pliegue curvo.

Las distintas zonas del lóbulo parietal

I PARTE: LOBULO PARIETAL ASCENDENTE

La parte de la corteza que se encarga de recibir, percibir y analizar la sensibilidad de las distintas zonas del cuerpo recibe el nombre de corteza somestésica. Por decirlo de una manera más llana analiza el tacto. Esta zona de la corteza ocupa la parte anterior del lóbulo parietal, la llamada circunvolución parietal ascendente y es el destino final de las vías sensitivo-somáticas de la mitad opuesta.

La pérdida de esta zona sensorial hace que la persona...

• No pueda localizar bien las diferentes sensaciones de las distintas partes de su cuerpo.
• No pueda juzgar cambios de presión en su piel.
• No pueda determinar la forma de los objetos.
• No pueda conocer la textura de los materiales.
• No pueda apreciar cambios finos de temperatura.
• No pueda tener sensibilidad postural.
• No pueda distinguir entre contacto simple y doble.
• No pueda localizar el estímulo sensitivo.

II PARTE:   EL LÓBULO PARIETAL SUPERIOR

El conocimiento actual del lóbulo parietal ha mejorado notablemente al que existía hace 20 años cuando escribí el artículo original, ya que entonces, se desconocían bastantes de sus funciones. Apenas se sabía que era un área de percepción, de reconocimientos táctiles y asociada a las habilidades manuales. Pero hoy en día (2015), en el momento en que reviso el artículo, se ha avanzado bastante en el conocimiento de esta área, y se ha visto que el lóbulo parietal es la zona cerebral encargada especialmente de recibir las sensaciones de tacto, frío, presión, dolor y equilibrio. Se ha observado que existe dentro del lóbulo, una zona especial, que corresponde al área 7 de Brodman, que tiene una complejísima organización cortical y cuya morfología tiene una marcada valoración individual, tanto en la forma como en la longitud. Esta zona, tiene numerosas conexiones corticales con la región anterior o sensoriomotora, con las regiones cognitivo-asociativas del lóbulo parietal inferior y con la corteza visual primaria. Además, tiene importantes conexiones con núcleos subcorticales, tálamo y áreas del tronco cerebral. La zona 7 parece ser una parte recientemente evolucionada del cerebro, ya que está más desarrollada en los seres humanos que en los primates. Esta ampliación de la zona parietal ha sido una de las características de la evolución del cerebro en la especie humana y es un factor importante en la variabilidad evolutiva moderna. Parece ser que esta zona 7, es uno de los principales centros de integración de los procesos funcionales del cerebro. Tiene muchas conexiones con los lóbulos frontales, que es donde se dan muchos procesos asociados a programación y decisión. Esta zona tiene también funciones relacionadas con la memoria episódica, el procesamiento visual y espacial (dirección de la atención en el espacio y operaciones manuales) los procesos de reflexión sobre uno mismo, y funciones relativas a la conciencia (integración de las informaciones cerebrales internas con las informaciones externas o ambientales) por lo que representa una parte importante en los procesos de autoconciencia.

También esta zona concreta, según un estudio del Institute of Noetic Science, que ha cartografiado las zonas vinculadas a la actividad espiritual humana, se ve activada en las personas que meditan u oran con asiduidad. Esta actividad cerebral puede originar percepciones espaciales anormales, así como la pérdida del sentido de uno mismo, lo cual forma parte tradicionalmente de las conocidas experiencias místicas.

III PARTE: EL LÓBULO PARIETAL INFERIOR

Tiene dos partes, la circunvolución angular y el lóbulo del pliegue curvo.

• La circunvolución angular

Está al final de la cisura de Silvio en el lóbulo parietal inferior y es un sitio de conexión con el lóbulo temporal (audición), con el lóbulo occipital (vista) y con la circunvalación parietal ascendente (tacto).

Esta zona tiene una gran importancia para muchas funciones intelectuales de la corteza cerebral, en particular, la interpretación de las distintas experiencias sensoriales, ya sean visuales, auditivas o somáticas. La estimulación eléctrica de esta circunvolución angular origina pensamientos complejos, recuerdos de escenas visuales o auditivas (como piezas de música o algunas palabras). Por ello se piensa que en esta área y en el lóbulo temporal, se almacenan los patrones de memoria. La destrucción de este centro puede trastornar mucho el intelecto, pues la persona se vuelve incapaz de interpretar el sentido de los mensajes sensitivos. Así, se pueden oír perfectamente unas palabras (oído), pero no pueden ser ordenadas en pensamientos coherentes, o quizá se puedan leer unas palabras de una hoja escrita (vista), pero se es incapaz de reconocer el pensamiento expresado.

• El lóbulo del pliegue curvo

Parece que la función de esta zona está más relacionada con la escritura. Es decir, la comprensión de los símbolos gráficos.

Entonces, podemos resumir las funciones de la totalidad del lóbulo parietal (ascendente, superior e inferior), en una gráfica sencilla y muy esquemática

DOMINANCIA   HEMISFERICA CEREBRAL

Las funciones del lóbulo parietal suelen estar muy desarrolladas solo en uno de los dos hemisferios cerebrales, que se llama hemisferio dominante. En el 91% de las personas, el lóbulo izquierdo se vuelve dominante y el 9% restante, puede desarrollar simultáneamente los dos lados. La fisiología no sabe porqué un hemisferio es dominante pero lo que si sabe es que esta diferencia funcional tiene una base estructural, ya que la forma de ambos hemisferios, al contrario de lo que se ha dicho y mantenido durante muchos años, dista mucho de tener una simetría perfecta.

En el hemisferio izquierdo, el ángulo de inclinación de la cisura de Silvio es menor que en el hemisferio derecho. Esta asimetría es detectable ya en el feto humano, por lo tanto, no es atribuible al desarrollo del lenguaje o a alguna forma de aprendizaje desde la niñez. Es una asimetría constitucional, genética. La razón de esta asimetría no es conocida, pero si es un hecho demostrado que existe y que es la base de un funcionamiento neurológico distinto. Esta asimetría ha hecho que muchos centros cerebrales de funciones sensoriales o intelectuales, se sitúen en el hemisferio izquierdo. Así, por ejemplo, los centros cerebrales del lenguaje se sitúan en el hemisferio izquierdo, en concreto repartidos en dos zonas: El Área de Brocca situada en el lóbulo frontal y el área de Wernicke en el lóbulo temporal.

El papel fundamental del área de Wernicke radica en la comprensión del lenguaje, función que se complementa con la del Área de Brocca que procesa la elaboración de palabras. Ambas zonas, se comunican gracias a fascículos nerviosos que pasan por el lóbulo parietal, por lo que cuando hay trastornos de este lóbulo parietal, se producen anomalías en el lenguaje. Como que el contenido del artículo está destinado a familiarizarnos con las funciones del lóbulo parietal, vamos a intentar adentrarnos un poco más en este lóbulo y para ello, estudiaremos los trastornos que tienen lugar cuando aparecen lesiones en estas zonas.

PATOLOGIA DEL LÓBULO PARIETAL IZQUIERDO (DOMINANTE)

Gran parte del conocimiento de las funciones de los lóbulos se ha obtenido cuando han aparecido lesiones en su zona, Por eso se sabe que, si hay alteraciones allí, encontraremos…

• Trastornos del lenguaje: la persona habla una jerga incomprensible que cree que es un lenguaje normal, aunque el ritmo y la inflexión pueden estar conservados.

Por ejemplo, para describir un cuadro en el que se ve a dos niños hurtando bizcochos a espaldas de una mujer, puede decir esto:” La madre está fuera aquí trabajando su trabajo para ir mejor, pero cuando ella está mirando los dos chicos mirando a la otra parte. Ella está trabajando otra vez”

• Imposibilidad de lectura, porque hay una falta de asociación entre los signos gráficos y los conceptos correspondientes.
• Incapacidad para escribir.
• Incapacidad para calcular.
• Imposibilidad para reconocer lo que se está tocando mientras se tiene los ojos cerrados.
• Desorientación sobre el propio cuerpo, ignorándolo o negando incluso la evidente enfermedad.
• Falta de habilidad y coordinación en las funciones motoras. Así en vez de saludar, pueden hacer un gesto amenazante.
• Pérdida de la sensibilidad fina (posición, movimiento, discriminación entre dos puntos…)
• Uso impropio de los objetos. No se comprende la verdadera naturaleza y función de los objetos y no se los utiliza correctamente.
• Trastornos en la capacidad de pensar claramente.
• Falta de atención.
• Déficit de memoria.
• En lesiones profundas, se dan también trastornos visuales.

PATOLOGÍA DEL LÓBULO PARIETAL DERECHO (DOMINADO)

La patología del lóbulo derecho, al ser este dominado, es mucho menos importante y apenas se observa:

• Incapacidad para reconocer el lado izquierdo del cuerpo.
• Falta de percepción del espacio exterior del lado izquierdo.
• Descuido del aliño personal en la parte izquierda.

HISTOLOGIA DEL AREA PARIETAL

Diversos autores han hecho una cartografía del cerebro estudiando el grosor y las características del córtex cerebral. Reproduzco a continuación el mapa de los campos arquitectónicos cerebrales según Brodman. El autor, encuentra 46 zonas con características diferenciables en todo el cerebro, y en concreto, en la zona parietal, distingue 8 zonas histológicamente distintas. Cada una de estas, tiene una estructura propia que le permite desarrollar unas funciones únicas.

Las zonas de Brodman

Así, el lóbulo ascendente marcado como zonas (1,2,3) está muy diferenciado de la zona 5. El lóbulo parietal inferior presenta diferencias muy grandes, y se observan claramente dos zonas, la 40 (lóbulo supra marginal de Gratiolet) y la 39 (lóbulo del pliegue curvo). La zona 7 (Lóbulo parietal superior) está muy diferenciada histológicamente del resto y preparada según suponemos para unas funciones específicas, como son la destreza manual (las tan nombradas y solicitadas manualidades) y las nuevas funciones mentales superiores relacionadas con la nueva inteligencia que se ha de formar, con la creación del centro de espiritualidad cósmica.

Clasificación histológica de Brodman

Para confeccionar este mapa arquitectónico, se estudia la importancia y la disposición de los diferentes niveles que configuran el córtex. Con ese análisis, se determina, la existencia de 6 capas principales distribuidas en el grosor de la corteza cerebral:

Las distintas capas de la arquitectura cerebral

Gracias al estudio histológico, se pueden diferenciar claramente, los distintos subniveles del lóbulo parietal, ya que cada nivel, presenta una arquitectura especial y diseñada para llevar a cabo funciones específicas. Incluso la zona 7, que corresponde al lóbulo parietal superior, está dividida en dos zonas, la 7ª y la 7b, con una estructura algo distinta.

Observamos la arquitectura propia de la zona 7 (Lóbulo parietal superior)

Localización del centro cerebral de espiritualidad cósmica

DESARROLLO DEL CCEC

Fue quizás en el año 1983 cuando se habló por primera vez la idea de crear un nuevo centro cerebral nuevo que impulsara al ser humano en su camino de evolución. Se citaron en ese momento dos métodos, dos técnicas para realizar tal fin, aunque ambas perseguían lo mismo: el estudio de los antiguos hombres que poblaron la tierra, que desarrollaron una tecnología casi perfecta y que por alguna razón desaparecieron casi en su totalidad. Fueron esos hombres que más tarde recibieron el calificativo de Dioses por parte de la nueva civilización humana que surgió después del cataclismo. La pregunta lógica surge rápidamente…

¿Por qué? ¿Qué tenían esos seres de especial que puede hacer posible que de su estudio, de su aproximación, de sentirlos casi respirar y hablar…se despierte en aquel que los observa y estudia un centro cerebral “nuevo” que le permita avanzar en el conocimiento y la sabiduría?

Intentaré responder luego a esta curiosa pregunta, pero antes me gustaría recordar unas palabras de Energía para que nos refresquen esta idea que para algunos puede ser nueva : “Del conocimiento de esta herencia que ya sabéis que podéis llegar a percibir y del conocimiento además que parte, pequeñísima parte de estos antepasados vuestros dejaron como historia, como señal sobre esta era de oleada humana, el conocimiento que os vendrá será para continuar y crear estos centros cerebrales capaces de captar la espiritualidad cósmica.”

La referencia es clara: llegará un conocimiento que tendrá dos fuentes:

Primera fuente: Conocimiento de la herencia por percepción magnética. Segunda fuente: Conocimiento que quedó registrado por la historia. Esto se conoce por Mitología y para su comprensión hace falta una buena dosis de estudio y meditación. Me gustaría abordar el estudio de estas dos fuentes, cuyo objetivo es la creación de este nuevo centro. Vamos allí.

I MÉTODO (Estímulo cerebral mediante la captación magnética de la historia.)

Sabemos que la Tierra es un enorme imán y que en su interior y a su alrededor hay un campo magnético muy importante. No ignoramos que hoy en día, el soporte que utiliza la tecnología para grabar cualquier información es magnético, porque las bandas magnéticas tienen la posibilidad de guardar información, sea esta del tipo que sea. Conocemos por la física que las líneas de fuerza de un imán se van haciendo cada vez más sutiles, más finas, a medida que nos vamos apartando del centro del imán. Sabemos que, en el subsuelo del planeta, es donde las líneas de fuerza son más densas, y es allí donde se ha registrado la grabación del psiquismo primario animal de todas las especies. En la capa de la corteza se ha almacenado el conocimiento mental, el saber concreto y la técnica, y en las capas superiores la actividad mental superior y espiritual. La grabación, como se desprende de todo ello, se realiza según la naturaleza o densidad del pensamiento. No olvidemos que el pensamiento está hecho de materia sutil y toda materia tiene una carga magnética y gravitacional. El conocimiento, está escrito en un sustrato material y las mismas leyes gravitacionales que siguen los cuerpos y que los hacen colocarse unos encima de los otros (los más densos abajo y los más ligeros arriba) obligan a las sustancias y conocimientos mentales a quedar dispuestos y atrapados según su densidad, siguiendo el mismo principio: lo denso abajo y lo sutil arriba. La ley de la gravedad es la que obliga básicamente al almacenamiento estratificado de las informaciones. Si consideramos ahora que los pensamientos groseros o densos son muy masivos porque están hechos de elementos primarios relativamente densos y que están muy sujetos a la ley gravitatoria y que por el contrario los pensamientos sutiles no lo están tanto…entenderemos esa frase: “La atracción de los conocimientos están en relación inversa a la importancia de estos conocimientos.”

Todos los conocimientos sean ya de tipo instintivo, técnico o espiritual, pueden ser importantes sin son acertados, pero son los conocimientos de tipo intelectual superior y espiritual los que tienen mayor sutilidad, mayor frecuencia vibratoria y los que son capaces de producir transformaciones psíquicas y morfológicas, y por tanto, acercan más el ser humano al hombre cósmico. Es decir, que un pensamiento muy importante (sutil) experimenta poca atracción terrestre, y un pensamiento poco importante (grosero) siente una fuerte atracción gravitatoria hacia la tierra, que lo hace colocar cerca de la misma. Es la masa del pensamiento, o lo que es lo mismo, su frecuencia vibratoria lo que hace que este pensamiento se disponga en un nivel u otro. Los pensamientos de alta frecuencia (poco masivos) ascienden por la falta de atracción y los de baja frecuencia, descienden por la fuerte atracción. Por otro lado, sabemos que dos cuerpos de masa fija sienten una atracción el uno hacia el otro dependiendo de la distancia a la que se encuentre. Si están muy cerca, se atraen y si están muy lejos, no se atraen tanto, es decir que la fuerza de atracción de la gravedad es inversamente proporcional también a la distancia. Pero es que además, se da la circunstancia de que la distancia a la que se sitúa un pensamiento de la Tierra es inversamente proporcional a su masa. Es decir que en último análisis es siempre la masa de ese pensamiento el que lo acerca o lo aleja de la Tierra y el que ocasiona variables en la ecuación de la Ley Gravitatoria. Esta ley dice que todos los cuerpos se atraen en función directa de sus masas e inversa al cuadrado de la distancia a la que se encuentran. La ley introduce un factor G llamado factor universal de gravitación y es número constante. La fórmula queda entonces:

Masa de la Tierra     x Masa del conocimiento F=     G       -------------------------------------------------------------------------------                                     ( Distancia entre las dos masas ) 2

En esta ecuación observamos que, si aumentamos la masa del pensamiento, el numerador se hace mayor y la fuerza de atracción aumenta, pero es que además, si aumente la masa, disminuye también la distancia entre las dos masas y el denominador se hace menor, haciendo que la fuerza de atracción sea aun mayor. El resultado sigue siendo el mismo: Si aumenta la masa del pensamiento, aumenta la fuerza de atracción gravitatoria y este, queda muy atraído por la Tierra y se acerca, Si el proceso es inverso y disminuimos su masa, el pensamiento, siente poca atracción y se aleja.

Bien, ya sabemos cómo y porqué quedan registradas las experiencias en el soporte magnético del planeta. Ahora bien, este fenómeno tan sorprendente para aquel que lo conoce por primera vez, es parecido al de muchos sistemas de grabación de información que se utilizan hoy en día. El más sencillo de todos es el de la grabadora común, Se utiliza para ello una tinta de ferrita, capaz de recibir campos magnéticos y de almacenarlos de alguna manera. La voz es transformada en electricidad por un micrófono, la señal se amplifica y pasa por un imán que genera un campo magnético que incide en la cinta y deja una señal fija al incidir sobre el hierro. Esta información almacenada magnéticamente, puede ser leída por un proceso inverso. Cuando por debajo de la cabeza reproductora pasa la cinta, las porciones imantadas, inducen en la bobina tensiones eléctricas que son amplificadas y luego reproducidas por el altavoz.

No perdamos esto de vista, la señal ha sido grabada en el campo magnético del hierro, ha permanecido en el indefinidamente y ha sido reproducida cuando el sensor magnético se ha puesto en marcha. El sistema de grabación magnético planetario, utiliza también el soporte magnético creado por el hierro que existe en el interior de la Tierra. La señal permanece allí configurando la historia hasta que un decodificador magnético adecuado se pone en marcha y traduce la señal a un lenguaje comprensible.

La intensidad del campo magnético terrestre no es uniforme, ya que es máxima en los polos y mínima en el ecuador. Además, el campo magnético terrestre no se distribuye de una manera tan exacta y simétrica como el de un imán, ya que la capacidad de conducción de las líneas magnéticas originadas el interior del planeta depende de la cualidad y naturaleza de la corteza terrestre. Así sabemos que las zonas de la corteza terrestre que tienen un gran espesor, es decir zonas montañosas, y que no tienen debajo una gran actividad calórica que desmagnetice a los átomos de Hierro, Níquel y Cobalto, son potencialmente zonas de buena conducción magnética. Puede suceder al contrario y que encontremos zonas de amplia corteza terrestre, pero que por ser jóvenes, estén con actividad de choque de placas continentales y al estar sometidas a un gran calor, las moléculas de Hierro se desmagnetizan, convirtiéndose entonces en zonas débilmente magnéticas. Pero, por si fuera poco, la distribución del Hierro (que es el elemento que mejor conduce el magnetismo) en la corteza del planeta no es regular, y eso hace que haya zonas con un magnetismo superior a otras. A menudo, la presencia de minas y yacimientos de Hierro, plata y oro, como el de otros elementos muy conductores, hace que el campo magnético local varíe de una manera importante.

Todo esto, hace que estas zonas magnéticas, cargadas de psiquismo primario instintivo, conocimientos y espiritualidad, no se extiendan por igual en todo el planeta y su superficie, sino que hay sitios donde el magnetismo es muy fuerte y se puede detectar muy fácilmente.

LOS SENSORES DE REPRODUCCIÓN

Hay zonas en la corteza cerebral capaces de recibir y analizar radiaciones de una determinada banda. La prueba es que vemos, oímos, tenemos tacto, olemos y gustamos y todo ello se debe a que transformamos radiaciones y moléculas en impulsos bioelectromagnéticos que son decodificados en zonas específicas del cerebro.

Pero aquí estamos hablando de otra capacidad, que es la capacidad de detección y análisis de campos magnéticos. ¿Existen sensores periféricos de campos magnéticos y un analizador central localizado en el cerebro? Parece ser que la respuesta es sí, de lo que deducimos que el organismo tiene incorporado una especie de magnetómetro. Estos sensores periféricos son dos:

• Sensor nasal:

Está localizado en las fosas nasales. Desde allí el estimulo penetra en el cerebro y viaja a la hipófisis y luego a la epífisis. En ambos sitios, provoca una liberación de hormonas que son vertidas a la corriente sanguínea. Estas hormonas, son como sabemos el asiento de elementos primarios sutiles que son introducidos a la economía sanguínea y liberados en la zona cerebral que los necesita. Allí, en el área parietal superior, provocan con su llegada una estimulación de toda esa porción del córtex. El resultado es una reactivación importante del potencial bioeléctrico de la zona. Estas hormonas liberadas en el torrente sanguíneo tienen una función estimuladora del centro de recepción. Si bien es cierto que estas estructuras glandulares, responden frente a la presencia de campos, es también cierto que la manera específica de responder es una función que depende de la estructura energética del individuo, característica que hace que algunas personas pueden sentir estos sitios de alta energía y otras personas no. En definitiva, la manera de cómo se responde a este estímulo está directamente relacionada con la frecuencia vibratoria de la epífisis y la hipófisis y este valor , es a su vez un resultado de la frecuencia vibratoria general de la persona.

• Sensor coronario

El sensor coronario, está situado en el centro coronario, en la articulación occipito-parietal. Esta es la segunda vía de entrada de los campos magnéticos. En este caso, el sitio de entrada del estímulo está muy cerca del sitio de llegada (área parietal superior) por lo que el impulso apenas se ha de desplazar.

Circuitos de estimulación de la zona parietal.

Así, tenemos dos vías de entrada que, de una manera distinta, hacen llegar el estímulo magnético al área cortical parietal que debe traducirlo según su actividad y desarrollo. Este sería el analizador central, el verdadero sitio de captación y centro de recepción, centro de espiritualidad cósmica o antena de percepción. Parece que estemos hablando de cosas muy nuevas, pero las personas que han tenido interés en estudiar el tema de las fuerzas telúricas, saben que ancestralmente, el ser humano, ha conocido de la importancia de estas zonas esparcidas por la geografía que gozaban de una gran carga magnética.

Chinos, egipcios, romanos, celtas y civilizaciones de todo el mundo, han construido sus centros de transformación, de transmutación allí donde la energía de la tierra emanaba con gran fuerza hacia el cielo y viceversa. Estos sitios de poder, donde se construían templos y catedrales buscaban elevar al ser humano a una dimensión superior, a un nivel celestial. Hoy en día, a pesar de la maravillosa fuerza telúrica de estos centros, que aún se mantiene, la contaminación del pensamiento manipulador de la religión, con su poder, su avaricia, su falta de amor y su mentira, han destruido gran parte del interés espiritual de estas localizaciones. Afortunadamente, aún hay muchos sitios vírgenes en la madre naturaleza, en donde cielo y la tierra se comunican. Éste debería ser el emplazamiento de las nuevas “catedrales”. Su misión sería parecida a la de siempre, pero ahora el plan sería algo más claro. Estos nuevos templos, estarían construidos en sitios donde la carga magnética afloraría con gran vitalidad y donde no hubiese habido una construcción anterior que hubiese contaminado lugar de fanatismo, odio o temor.

Y puestos a dejar volar la imaginación, podrían ser centros construidos en base al logotipo del Rombo y que siguieran las normas de armonía y relación que se derivan de él. Sin duda, serían más claros, luminosos y transparentes que los antiguos, hechos también con otros materiales y quizás dotados de una cierta movilidad que permitiera ajustar su orientación a la época del año y la declinación solar. El olor, el sonido y el calor estarían presentes como han estado siempre. Sólo faltaría el amor, elemento que desafortunadamente ha faltado   en muchos de los centros espirituales actuales.

II METODO DE ESTIMULACION DEL CCEC (estímulo cerebral mediante el elogio, el estudio, y la comprensión de su historia escrita)

Este segundo método ha sido el más abordado en el trabajo actual. Este trabajo se ha realizado estudiando las mitologías, que hablan, de este tan querido antepasado. Hemos analizado con profundidad como era la vida de este hombre y lo hemos sentido muy cerca, muy reconocido por todos nosotros. Hemos intentado entenderlo, asimilarlo y hacerlo familiar. Hemos hecho el esfuerzo de comprender cuales eran todas sus características, en que destacaban, que hacían, como vivían, como sentían, cuales eran sus habilidades y que función desempeñaron en su contacto con el ser humano. No hemos acudido a los centros de poder para captar la esencia del antepasado, pero hemos hecho el esfuerzo imaginativo de percibirlos, de sentir sus vidas y su naturaleza íntima. Para ello, hemos buscado referencias en los libros y lanzado la imaginación al aire para poder percibirlos en su vida diaria. Tal vez, con este ejercicio imaginativo, aparte de adentrarnos en la mente y el conocimiento de nuestro antepasado, hemos potenciado algunas otras características. En primer lugar, desarrollamos ampliamente la alabanza, el estudio y el discernimiento. Tres cualidades preciosas que forman parte del ser humano. Pienso que antes de seguir adelante, deberíamos recordar el significado de estas palabras:

• ALABAR: celebrar con palabras, elogiar, encomiar.
• ESTUDIAR: esfuerzo que pone el entendimiento aplicándose a conocer alguna cosa.
• DISCERNIR: distinguir una cosa de la otra, señalando las diferencias que hay entre ellas. Diferenciar, comprender, enjuiciar, apreciar.

Ciertamente, en el estudio de las mitologías, trabajamos estas tres funciones ya que elogiamos las vidas de estos seres, estudiamos y analizamos su paso por el planeta, y finalmente discernimos y enjuiciamos su manera de vivir, sus costumbres y sus debilidades. Al hacer todo este trabajo, hicimos una acción sobre tres centros corporales, ya que el corazón alaba, la mente estudia y el espíritu discierne.

Los tres centros vitales del ser humano

Sin saberlo, realizamos una acción sobre estos tres centros, y al hacerlo, hicimos que la antena de percepción se pusiera en marcha. Y entre otras cosas eso sucedió así porque, a mi entender, es necesario que este maravilloso triángulo funcione correcta y equilibradamente para que surja esta antena.

Este segundo método se parece bastante al primero, pero éste es más estructurado, más sólido y lento también. Parece la otra polaridad del primer estudio. Si bien el primer método es más intuitivo, perceptivo, este es más intelectual, más analítico y racional. El juego puede haber sido estudiar un mismo fenómeno desde dos ángulos distintos, para buscar una doble estimulación cerebral.

Tal vez, nuestro colosal antepasado, poseía ya este centro cerebral de percepción cósmica. Nosotros, descendientes suyos, debemos también heredar otras funciones además de las ya conseguidas. Nuestro cerebro en su afán evolutivo ha ido creando centros hasta permitir ahora que las conexiones neuronales lleguen a un nivel que permitan desarrollar este nuevo centro cerebral. Quizás, el doble ejercicio de percepción sensorial y estudio de las mitologías, ha conseguido este resultado.

III METODO DE ESTIMULO DEL CCEC (Las habilidades manuales)

Hemos visto antes la localización del CCEC. Esta zona con funciones poco conocidas para la fisiología neuronal actual parece estar relacionada con la habilidad, con la destreza manual. Siempre se nos ha hablado y se nos ha solicitado que hagamos manualidades. Pienso que los trabajos manuales, además de resultar un ejercicio importantísimo para familiarizarnos con las formas y los colores de la SFR, realizan un estímulo neuronal en el mismo sitio donde se halla localizada el área de percepción espiritual. Todos los trabajos manuales implican la utilización fina del tacto en los extremos de los dedos, una zona donde hay millones de terminaciones nerviosas y que producen un intenso estímulo en esta área cerebral. Las yemas de los dedos son centros de entrada y salida importantísima de energía creadora y están situados en el dibujo del Rombo en la parte intermedia, a medio camino del cielo y la tierra, allí donde se juntan la energía superior y la energía inferior.

IV METODO DE ESTIMULO DEL CCEC (El vivir diario)

El correcto vivir del día a día, es capaz de formar este centro cerebral. Tenemos una referencia escrita:

“Pensad que este nuevo órgano de percepción que habéis formado es aún tierno y una percepción perfecta, requiere una cuidadosa y purificada vivencia transmisora de sentimientos, pensamientos y actos.”

Que el sentimiento está ligado al corazón, es algo que es obvio para muchos, que el pensamiento que está unido a la mente también, pero que el tacto esté unido al espíritu no parece tan claro. Pienso que puede ser así, y la deducción, sale de algunas de las definiciones de espíritu.

Espíritu:

• “Vigor natural y virtud que alienta al cuerpo para obrar”
• “Principio generador”
• “Aliento, brío, vivacidad, esfuerzo”

Sin este espíritu, no hay acción, no hay movimiento, no hay actos. Hay entonces, una relación clara en este principio generador y la acción generada (el acto). Podría ser entonces que nos estén hablando de “una cuidadosa y purificada vivencia del corazón, de la mente y del espíritu”, ya que: El corazón crea los sentimientos, la mente origina los pensamientos y el espíritu otorga la fuerza para realizar los actos.

V METODO DE ESTIMULO DEL CCEC: EL SALUDO DEL ROMBO

• Alabada sea la SFR
• Por siempre sea loada, estudiada y discernida

Acerca de este saludo, nos dicen: “Los circuitos por los que pasa cada palabra, sonido, sentimiento, pensamiento, son canales seguros para vivificar y sensibilizar la antena.” La frase, nos está diciendo que el corazón, la mente y el espíritu tienen unos canales propios, y que éstos en algún sitio, en un punto común, tienen algún nexo con el ccec.

Está claro que corazón, mente y espíritu tienen canales, pero pienso que el desarrollo de este apartado nos llevaría en otra dirección y lo mejor será que lo dejemos para otro momento… Me gustaría no obstante, y aquí sí que pienso que no me salgo del tema, poder ampliar, poder estudiar un poco más este saludo y para ello, como no, debemos remitirnos a un diccionario. La primera parte del saludo es:

• ALABADA SEA LA SAGRADA FORMA DEL ROMBO

¿Qué significa cuando decidimos: alabada sea la SFR? Significa que estamos elogiando, celebrando con palabras y dando testimonio a la vez de un mérito, de una certeza, de una realidad, de un conocimiento al que, juzgados, bueno y del cual podemos hacer apología. Alabar está unido a hablar, para dispersar con palabras meritorias y ponderadas el valor de algo que se da por bueno.

La respuesta de la salutación tiene tres niveles y cada uno de ellos tiene una acción sobre un centro específico. La frase de la respuesta es: por siempre sea loada, estudiada y discernida. Vamos a desarrollar cada una de las palabras que se encadenan para dar la respuesta.

La primera de las palabras es: LOADA

Loar es sinónimo de alabar. La Loa, en el teatro antiguo, era un prólogo, en la forma de discurso, con el que se daba alabanza a la persona ilustre a quien estaba dedicada la obra. Loar es la forma de empezar. Sin loar no es posible empezar bien. La loanza, la alabanza, abre el interés, las ganas de conocer. Es la presentación emotiva, que hace abrir los ojos y los oídos. La alabanza (que no es adulación) es el preámbulo que facilita la atención. Esta carga emotiva de las palabras y sus significados hace nacer la sed, el deseo, la curiosidad, las ganas de saber que es aquello acerca de lo que se loa. La loa es emotiva y bella. Da una idea abstracta, amplía y grandilocuente de aquello que luego deberá ser pormenorizado para su comprensión e integración. La loa abre la primera puerta, el corazón. Este centro vital, este centro de vida, debe ser el primero en importancia. De hecho, la vida palpita mientras lo hace el corazón y se apaga cuando lo hace este centro. El es lo primero.

La segunda palabra de la salutación es: ESTUDIADA

El estudio es el esfuerzo que pone el entendimiento para conocer alguna cosa. También es el trabajo empleado en aprender y cultivar una ciencia o un arte. Palabras sinónimas de estudio son examen y análisis. El examen es la indagación que se hace acerca de una cosa. El análisis es la distinción y separación de las partes de un todo hasta llegar a conocer sus principios elementales. Muchas veces, el estudio es confundido con la grabación que realiza el cerebro cuando se mira repetidamente un objeto o un texto. Esta función es la memoria, pero no el estudio. Gran parte de la enseñanza actual está basada lamentablemente en la memoria y no en el estudio. El estudiar la SFR, implica algo más que memorizar, ya que este proceso, se realiza automáticamente en cuanto se quiere entender y comprender el sagrado arquetipo. El estudio está unido a la indagación, a la búsqueda, al esfuerzo intelectual que se necesita para conocer las leyes, los principios básicos del funcionamiento de algo. El estudio es una función indagadora de la mente, que es la potencia intelectual del alma. No ha sido demasiado fácil para el ser humano dar un significado comprensible a una palabra tan difícil como alma. Pero el alma, se ha tenido como una parte del ser humano que sobrevivía a la muerte (Platón). Desde allí, y hasta nuestros días, se le han dado cientos de definiciones. Todos coinciden en algo: el alma piensa. Hasta hace menos 100 años no estaba muy claro que el cerebro fuese el asentamiento del pensamiento, pero hoy en día no hay dudas científicas acerca de ello y está demostrado que los procesos de pensamiento se deterioran si hay lesiones en el cerebro. Se sabe por ejemplo que la atención se localiza en diferentes zonas cerebrales y cada lesión de una determinada zona cerebral, presenta síntomas concretos. La mente tiene un asentamiento, una estructura anatómica que permite que quede anclada y manifestada. Esa estructura es el sistema nervioso y en concreto el cerebro. Estudiar (examinar, aprender a conocer), es estimular a todo el órgano cerebral y como no, a toda la mente. Bien, ya tenemos localizado el órgano-diana que busca la segunda palabra de la salutación, el segundo centro: el cerebro.

La tercera palabra de la salutación es: DISCERNIDA

¿Qué es discernir? Discernir es distinguir una cosa de otra, señalando la diferencia que hay entre ellas. Sinónimos de discernir son: diferenciar, comprender, enjuiciar, apreciar.

Bien, vayamos por partes porque esto es un poco más complicado. Sabemos que este saludo trabaja sobre tres centros (corazón, mente y espíritu) y que para ello se utilizan tres funciones (la alabanza, el estudio y el discernimiento). Asociamos pues el discernimiento a aquello que entendemos como “espíritu”. Cuando nos hablaron de estos tres centros, resultó fácil colocar el corazón y la mente, pero no así al espíritu. ¿Qué es el espíritu? Si miramos al diccionario, veremos algunas de estas definiciones:

• Ser inmaterial y dotado de razón.
• Producto más evolucionado de la materia.
• Vigor natural y virtud que alienta y fortifica el cuerpo para obrar.
• Principio generador, tendencia general, carácter íntimo, esencia consustancial de una cosa.
• Sustancia sutil y ligerísima necesaria para la vida del animal.
• Animar, Valor, brío, esfuerzo.
• Vivacidad, ingenio.                                  

De todo esto, se desprende que el espíritu es la fuerza viva, dotada de gran energía, que tiene un soporte casi inmaterial y que confiere la vitalidad, el carácter íntimo y a su vez alguna forma de energía mental, ingenio y razón. Bien, desglosemos todo esto un poco… El ingenio es la facultad que permite discurrir o inventar con prontitud, pero también es la facultad creadora. El entendimiento es una función mediante la cual se entiende, se concibe las cosas, se las compara, se las juzga y se le induce y deduce. La razón es la facultad de discurrir el entendimiento.

Bien, empezamos a ver estas aparentes dos polaridades del llamado “espíritu”. Por un lado, es una fuerza estimuladora, pero dotada de entendimiento. El entendimiento permite, como hemos dicho antes, comprender, comparar y juzgar. Estas tres funciones son las mismas que proporciona el discernimiento. Y es que el discernimiento necesita de funciones muy complejas. De una parte, es necesario entender, pero ha ser una comprensión muy amplia y profunda. De esta sola manera se puede comparar, porque la amplitud es premisa básica para una correcta comparación. Si existe la posibilidad de comparar dos cosas, es que se ha podido llegar a entender plenamente la naturaleza de los objetos comparados, y entonces se puede emitir un juicio comparativo y establecer si esto y aquello se parecen o no. El discernimiento necesita pues de tres funciones básicas: entendimiento, comparación y juicio. El discernimiento es quizá la cualidad principal del espíritu, como la alabanza lo es del corazón y el estudio de la mente. Necesitamos como siempre de la ayuda inestimable de las Escrituras para poder llegar un poquito más lejos. ¿Qué nos dicen acerca del espíritu?

“El espíritu da vida y motivo de existencia” “Espíritu, término ambiguo, al cual se designan diversas formas de energía mental. No siempre esta palabra ni por vosotros está perfectamente empleada. El espíritu en su significado más intrínseco, más puro, es la chispa de la vida sin mácula que cada criatura evolucionarte posee por sí misma. Esta chispa de vida tiene la misma naturaleza, la misma coloración del Rayo que dicha criatura tiene como regente.” “El espíritu no se puede delimitar, ni ubicar, ni limitar a una zona corporal ni geográfica.” “El Espíritu es la chispa divina que no toma parte en el drama cósmico”

Si se nos da la palabra discernimiento como estimuladora del espíritu, debemos suponer que el espíritu en sí, aparte de ser la chispa de vida, es un conjunto de funciones mentales que vibran con el discernimiento, ya que, de otro modo, esas cualidades no podrían ser estimuladas con esta función. Mucho más lógico sería utilizar la palabra “vida” o “vigor” para hacer resonar al espíritu, pero sí se ha escogido esta palabra, es porque, aunque el significado más puro de la palabra espíritu, sea la chispa que da vida, habrá sin duda otro aspecto, menos interior, que está relacionado con algunas funciones mentales, sobre todo con el discernimiento.

Pero, por otro lado, sería un poco absurdo que una energía capaz de dar vida, de estimular, no albergara a una facultad inteligente capaz de saber cómo y de qué manera estimular. No pienso que la fuerza del espíritu carezca de discernimiento, al contrario. Si algo tiene que esta fuerza además de dar vida, es que es capaz de otorgar discernimiento.

VI METODO DE ESTIMULO DEL CCEC (La pureza de la enseñanza)

Beber de fuentes contaminadas, es dañino y puede ser mortal en ocasiones. La vida necesita pureza para poderse desarrollar óptimamente. Este nuevo centro cerebral, es muy sensible a cierto tipo de informaciones tóxicas y contaminantes. Así se refleja en los escritos del Rombo: “No bebáis de fuentes contaminadas, que calmarían la necesidad, pero que destruirían este maravilloso centro de percepción cósmica.” De lo que deducimos que la pureza de la enseñanza y de las informaciones que llegan al cerebro, es vital para el desarrollo y mantenimiento del centro cerebral de espiritualidad cósmica o antena de percepción.

VII METODO DE ESTIMULO DEL CCEC (el camino de la 4ª Dimensión)

La apertura ante este nuevo centro, me he sugerido una relación con el sendero de la 4ª Dimensión ya que esta dimensión, está vinculada con la proyección de las vibraciones a los cuerpos densos y su asimilación. Además, debemos recordar que las manos (el tacto), la destreza manual y el CCEC están vinculados a la 4ª Dimensión. Por esto, cualquier acción encaminada a desarrollar armónicamente esta cuarta dimensión, tendrá un efecto positivo en el estímulo de este nuevo centro cerebral. Por todo ello, pienso que en realidad, hay múltiples vías dentro de la enseñanza de la SFR que pueden actuar en ese nivel dimensional   y pienso que debemos valorar las siguientes posibilidades:

• Tener una actitud de abertura, de comunicación con lo espiritual.
• Dirigir la atención a la localización del centro y sentir su activación.
• Trabajar con el centro Hara, localizado en la parte media del cuerpo.
• Los actos de reflexión interior diarios para limpiar los arquetipos caducos que bloquean la 4ª Dimensión o camino central.
• El desarrollo del canal del amor.
• Toda la interiorización de la enseñanza de la SFR.

DESPERTAR Y FUNCIONES DEL CCEC

El despertar de este centro cerebral es una cuestión personal y por decirlo de alguna manera, no es transferible. Es cierto que tal como dice la teoría de los campos morfogenéticos, cuando un centro cerebral se despierta, es más fácil que otros centros de otras personas lo hagan también, y en la medida que más centros estén activos, habrá una tendencia a hacerlos con más facilidad, pero que sea más fácil no implica que el proceso tenga lugar de forma gratuita y espontánea en cualquier persona. La abertura o la activación de este centro, es el resultado de un proceso evolutivo personal. No por el hecho de conocer o pertenecer a un grupo de personas que encaminan sus vidas a la evolución, el centro se abre automáticamente. Las personas y su proximidad ciertamente pueden ayudar, pero el trabajo de activación es personal. El despertar de este centro es una cuestión individual y dependerá de lo que se esté sintiendo, creyendo y evolucionando. Este centro al igual que todos los centros cerebrales; puede estar inactivo o activo en grados muy diferentes, y a cada nivel de activación le corresponden funciones determinadas. Es pues muy posible que este centro esté pulsando tímidamente en una persona que ha emprendido un camino de crecimiento y evolución y que, por determinadas cuestiones y estímulos, su actividad se dispare y su actividad en un momento dado, crezca exponencialmente.

Pero este centro, por sí mismo, no hace que la persona evolucione. Este centro, cuando se ha activado por un proceso de evolución, hace que la persona pueda emitir o desarrollar cualidades que están de una forma virtual en este centro. Si la persona, no se conecta al centro, no se pondrán en marcha las actividades que están potencialmente diseñadas e incluidas en el centro. Estamos hablando del cerebro, de una zona cerebral que se puede medir y estudiar. Cuando esta zona que puede ser anatómica y funcionalmente pequeña o grande está activada y la persona se conecta a ella, es cuando el ser humano, puede realmente desarrollar lo que verdaderamente es, y la activación de este nuevo centro cerebral, llevará consigo la estimulación de funciones cerebrales.

Este nuevo centro cerebral ha de servir para acelerar el desarrollo del ser humano de la Tierra. Como se dice en las escrituras, la acción evolutiva, ha de tener una triple dirección:

• • Se han de abrir los ojos.
  • Se han de abrir los oídos.
  • Se han de crear los centros de espiritualidad cósmica.

• Y el despertar de este nuevo centro cerebral, llevará consigo la estimulación de algunas funciones:

• Servirá para crear una nueva inteligencia e impulsar la evolución.
• Dará la capacidad de penetrar más profundamente en el psiquismo de las personas.
• Ayudará a conocer la naturaleza íntima de las cosas.
• Abrirá el canal del amor.
• Permitirá conocer en profundidad las necesidades del hermano y encontrar la solución a sus problemas.
• Aportará una dirección clara y precisa en las acciones.
• Proporcionará una idea rápida acerca de cómo restablecer el equilibrio en cualquier situación.
• Nos pondrá en contacto con energías sutiles.
• Dará mayor capacidad de acción sobre la materia.
• Nos acercará a la comprensión del Padre creador.
• Incrementará la habilidad creativa manual.
• Desarrollará el sistema de asociación sensorial.
• Desarrollará el mecanismo de percepción del sistema de la herencia magnética.
• Permitirá acceder al conocimiento mental superior y espiritual grabado en las capas superiores.
• Y seguramente mucho más …